Liberarse Del Miedo A Dios

 

He vivido con miedo constante toda mi vida. No me refiero a miedos naturales como el miedo a las serpientes o a los insectos voladores. Temía a Dios. No me convertí en creyente porque realmente amaba a Dios, sino porque le temía. Vivía correctamente no porque quisiera honrar a Dios, sino porque tenía miedo de su ira.

Era incapaz de reconciliar la imagen de un Cristo amoroso con un Dios aparentemente duro. Había pecado una y otra vez a lo largo de mi vida porque sentía que nunca podría estar a la altura de la norma de Dios. Siempre que oraba a Dios, lo hacía para cumplir con mi deber como cristiano. Nunca me sentí seguro de mi salvación.

Pastor Prince, cuando empecé a escuchar sus enseñanzas, fue difícil desechar las creencias erróneas con las que me habían educado. Pero después de un año de escuchar el evangelio de la gracia, sus enseñanzas han cambiado mi vida. Empecé a entender que mi salvación se basa en el amor incondicional de Dios por mí. Ahora me siento muy amado por Dios.

En el pasado, siempre había sentido la necesidad de demostrar mi valor en la vida. Nunca pude aceptar el favor inmerecido de Dios. Pero ahora ya no siento la presión de tener que rendir para ganarme su amor. Ahora tengo esperanza porque sé que Dios está a mi favor, no en mi contra. Creo que Él no me condena cuando fracaso. Su amor y su gracia por mí me permiten mejorar. El pecado ya no me interesa porque Cristo me ama demasiado. La gracia de Dios me anima a ser libre del pecado.

Muchas gracias por predicar el evangelio de la gracia sin adulterar. Me ha liberado de todos mis miedos. Me siento como un cristiano nacido de nuevo. Me alimento constantemente de la Palabra, y crezco y maduro en mi fe. Su ministerio ha revelado verdaderamente a nuestro Señor Jesucristo. Usted y su familia siempre estarán en mis oraciones.

Shari Ann Sasu
Nueva Jersey, Estados Unidos